Escupiendo el asado

Saturday, October 08, 2011

La mujer y la red social

Mejor dicho twitter. Todos los días surgen nuevos datos estadísticos que reflejan el predominio femenino en el uso de las redes sociales (twitter). Se leen frases como (léase en tono solemne): “la mujer, motor fundamental de las comunidades virtuales” (twitter). Y otras muy parecidas que no tengo ganas de citar textualmente. Parece que finalmente la mujer halló una suerte de pseudoreivindicación de género en la interacción virtual: tantas veces postergada ante la preponderancia masculina en todas y cada una de las actividades de la vida, finalmente encontró un área donde lo supera por goleada. Esto es un hecho notable para cualquiera que tenga una cuenta de twitter: por cada tweet masculino, al menos hay 20 de su par femenino. Donde está la raíz de tanta necesidad de expresión en la mujer? Porqué tanta asimetría?

Independientemente de ser hombre o mujer, todo el mundo tiene necesidad de expresarse. En ese sentido, Internet se convirtió en una herramienta maravillosa para expresarse libremente: el surgimiento de los blogs y fotologs fueron ese primer acercamiento masivo al libre albedrío virtual, aunque aún no existía esta apabullante superioridad femenina. Causas? En el caso de los blogs, esta claro que desde su nacimiento éstos fueron pensados con una utilidad más periodística/literaria que simplemente “socializadora”. O sea, para el común de los monchos que habitan el globo terráqueo no estaba clara la opción de hacerse un blog, a menos que tengan algún tipo de inquietud periodística/literaria -la otra opción era hacer un diario intimo de sus vidas comunes y corrientes (la opción femenina por excelencia)-. Y el común de los monchos no tienen este tipo de inquietudes. Asimismo, a lo máximo que podía aspirar un flogger era a convertirse en cumbio. Y un blogger, en un bloguero K (y siempre existirá alguna boluda que se enamore del algún bloguero K). En fin, no quiero irme demasiado al carajo con la pseudoreflexión.

La cuestión es que aparece twitter, que es la simplicidad absoluta que el moncho necesita. Ideal, porque un tweet se lee rápido, 140 caracteres pedorros, un chiste de Corona ocupa menos que eso. Práctico –cualquier moncho puede escribir una oración-. Sencillo: es abrirse una cuenta y empezar a escribir, nada de plantillas y códigos HTML. Es tan simple, tan poco demandante, que el común de los monchos finalmente encontraron su lugar en el mundo virtual. Rápido y fácil siempre es sinónimo de éxito (y más cuando de monchos se trata).

Y acá entra la mujer: ellas en twitter interactúan con mujeres que hablan sobre la cuestión de ser mujer a diario, lo que genera una empatía absoluta en toda mujer. El común de la mujer solo espera encontrar seres con los cuales identificarse, básicamente otras mujeres. La identificación con el otro es fundamental para lo que sea que se te ocurra (amistad, sexo, etc), y las twiteras se identifican con el común de los sentimientos de la mujer sean o no twiteras: o sea, con la condición femenina real. Que quiero decir con esto? Que aquellos lugares que pretendían cooptar el común de los intereses de la mujer (Cosmopolitan, Utilísima, Partido Obrero, aborto legal, etc) no representaban los verdaderos intereses de una mujer, que si están representados –lógicamente- en el común de la mujer. Se entiende? No? Bueno, esperá que ahora viene mi reflexión final que rompe todo.

Básicamente, la histórica y universal dictadura del hombre cercenó esta condición que la mujer ahora disfruta en twitter. El hombre creó una imagen, un ideal de mujer que socioculturalmente le fue impuesto a la mujer. Ahora, la mujer se está despojando de toda esa nefasta carga cultural, y entonces surgen boludas como Malena Pichot y decimos “Wow que loca del orto! Por qué gusta tanto en las mujeres, si a mí no me causa gracia?” Porque ella expresa todo lo que históricamente una mujer nunca fue, y las mujeres dicen “Oia, que grosa que es, yo siempre pienso lo mismo, es una ídola”. Pichot, al igual que muchas otras "standupistas" devenidas en twiteras compulsivas sólo hablan de la mierda cotidiana que es ser mujer. Y nada, todo este despertar femenino recién está en una primera etapa. Aún le falta maduración, un golpe de horno. Me seguiste hasta acá?

Pasaran muchas décadas hasta que una Pichot alcance el status de un Corona. Tal vez ni siquiera los hijos de los hijos no reconocidos que jamás tuve puedan llegar a encontrar a una mujer que finalmente pueda ser graciosa, sagaz e inteligente sin apelar constantemente a su condición de mujer. Ese día gozaremos de una plena igualdad de los sexos. Tiempo al tiempo.

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1 Comments:

  • Con lo de iH tenía abandonada la lectura de este blog. Cómo me pude perder esto? leí tranqui hasta la parte de "Cosmopolitan, Utilísima, Partido Obrero, aborto". Ahí caí: el mejor post de todos.

    By Anonymous Sol, at 9:15 AM, November 10, 2011  

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