ASAD RETURNS*

Esta fué la tercera noche consecutiva que sueño con vos; y en cada uno de esos sueños estás interpretando distintos roles; a veces sos profesora, otras vendedora de ropa, o si no alguien que solo pasa, pero lo verdaderamente interesante del asunto, es la forma en que éstos sueños concluyen. En el primero, yo estoy en una tienda de ropa probandome unos jeans, y vos sos la insoportable vendedora que me interrumpe a cada rato preguntandome si la prenda me quedó bien, a la cuarta interrupción yo te agarro la mano con fuerza y te meto adentro del probador con toda la intención de cagarte a pedos, es entonces cuando me quedo petrificado mirándote a los ojos, dándome cuenta que vos sos vos y no otra (aunque eso ya lo sabía, pero queseyó, es un sueño, no le pidamos que tenga lógica) Fín del sueño. En el segundo, sos mi profesora en una clase de vaya saber que, yo estoy escribiendo algo sobre mi pupitre, vos te hacercas para ver lo que hago, y cuando te das la vuelta te tomo la mano impulsivamente, mi reacción no te sorprende y para mi asombro entrelazas tus dedos con los míos, y final nuevamente. En el tercer y último sueño, me estoy despertando en mi habitación y me encuentro con la sorpresa de que estas acostada a mi lado, profundamente dormida (por uno de esos milagros del mundo onírico, mi cama pasó a ser de dos plazas). Yo no entiendo como mierda llegaste hasta ahí, pero no tengo la menor intención de despertarte, tu imagen me transmite una paz conmovedora; solo atino a acariciarte suavemente la espalda, a sentir la calidez de tu piel y a implorar para que ese momento se alargue, se haga eterno. Recuerdo haber murmurado algo así como "no quiero volver a dormir". Por desgracia, en los sueños los deseos son concedidos, y desperté nuevamente, pero esta vez en el mundo real.

* El título del post es un anagrama, al mejor estilo de "El código Da Vinci" (que nadie vaya a pensar que tengo sueños comprometedores con el "turquito" Asad).

COMPARTIR |