Escupiendo el asado

Friday, March 12, 2010

La mujer es cosa así

Siento una profunda debilidad por la mujer (mejor dicho las mujeres [ciertos tipos de mujeres] pero sin tomarlas en su cojunto). El sexo femenino es algo sumamente atractivo (ja! y también descubrí la pólvora), y no es casualidad que mientras escribo estas palabras estoy sosteniendo un porrón de Guinness en mi mano, y me doy cuenta que la curvatura del envase dibuja a la perfección el cuerpo de una mujer "como a mi me gusta", o sea, una cintura sutil que invita a recorrerla con los dedos hasta llegar a la base, la cual és lo suficientemente firme como para apoyar el resto de su arquitectura, sin temor a que sucumba ante el mas mínimo movimiento telúrico (amo a esta cerveza). Y es por esa particular forma que tiene la mujer, con más o menos cintura, con más o menos culo, que resulta una tentación constante al abrazo espontáneo, a intentar envolver con las extremidades superiores esa Guinness sagrada, y comprobar empíricamante que no existe nada más ergonómico que la cintura de una "mujer así". Pasar horas y horas abrazado, sin importar la posición, es el mejor ejercicio de relajación que la humanidad haya experimentado.

Por esa misma razón no logro entender a los que besan sin abrazar, y ojo! he visto tipos que transan horas sosteniendo un abrigo con una mano y apoyándose sobre el picaporte de una puerta con la otra. También está la transa onda "gimnasia con argollas", esta ya es más característica del subte, y consiste en besar a la dama sosteniendosé de las agarraderas del vagón. Tal desprecio por las curvas femeninas es insultante, dan ganas de tomar de las caderas a la damnificada y brindar una cátedra amatoria, aún con el consecuente riesgo de intercambiar sabiduría por golpes de puño (además de quedar como un pajero).


Hace unos días me detuve en un negocio de ropa cuya vidriera estaba en plena renovación (debe ser por el cambio de temporada, pensé [un derroche de astucia por mi parte]), y me llamó mucho la atención el modo en que uno de los empleados retiraba los maniquíes del escaparate: los muñecos de hombres se los ponía abajo del brazo, como quién lleva una tabla de surf, en cambio a los maniquíes femeninos los tomaba por la cintura, con suma delicadeza, como si él fuese un bailarín de danza clásica preocupado por la integridad de su partenaire... "Eso es un hombre", medité en aquel momento, un hombre absolutamente embrujado por esas curvas diabólicas fruto de una macabra creación, eso es un hombre subyugado por una simple forma, inanimada, estéril e insustancial. Una simple forma que me hace sentir absolutamente vulnerable.

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8 Comments:

  • Ahh..me hiciste acordar muchísimo a unos fragmentos de Ray Bradbury, lectura juvenil si las hay (debe ser porque tu post es también muy juvenil ja!) de una novela muy linda que se llama "Something Wicked This Way Comes" acá se llama La Feria de las Tinieblas...es una parte en que hay un escaparate con un bloque de hielo que adentro tiene la forma de una mujer..
    cata

    By Anonymous Anonymous, at 1:11 PM, March 12, 2010  

  • Lo encontré! (internet es la cosa las hermosa de la humanidad!)
    cata


    "Alguien había puesto allí dos caballetes paralelos, bajo una lámpara. Sobre esos dos caballetes, como un túmulo de nieve y cristal, había un bloque de hielo de dos metros de lado que brillaba con una débil luz propia, de color verde azulado, muy pálido.
    Era una piedra preciosa enorme y helada que descansaba allí en la oscuridad.
    En un pequeño cartón, a un lado, cerca del escaparate, podía leerse a la luz de la lámpara este mensaje caligráfico:

    El Pandemónium de las Sombras, de Cooger y Dark: Fantoches, Circo de Marionetas.
    Feria al aire libre.
    Vean aquí muy pronto una de nuestras muchas atracciones:
    ¡LA MUJER MÁS HERMOSA DEL MUNDO!

    Los ojos de Halloway saltaron del anuncio al bloque de hielo dentro de la tienda, y luego otra vez al anuncio.

    ¡LA MUJER MÁS HERMOSA DEL MUNDO!

    Y de nuevo al largo y frío bloque de hielo. Era un bloque de hielo como aquellos de los magos ambulantes que había visto en la infancia, cuando la fábrica local de hielo contribuía con un trozo de invierno, y allí dentro, durante doce horas, yacían congeladas las doncellas mientras la gente miraba y en la cruda pantalla blanca desfilaban las comedias, y las atracciones iban y venían, y al fin las pálidas mujeres salían deslizándose, escarchadas, liberadas por transpirados hechiceros, y desaparecían sonriendo en la oscuridad detrás de las cortinas. Y desaparecían sonriendo en la oscuridad detrás de las cortinas.
    ¡LA MUJER MÁS HERMOSA DEL MUNDO!
    Pero en este trozo de cristal de invierno solo había agua de río, congelada.
    No. No estaba vacío del todo.
    Halloway sintió que el corazón se le volcaba con un latido especial.
    ¿No había dentro de esa joya de invierno una oquedad particular, un hueco voluptuoso, un vacío prolongado que ondulaba de arriba abajo en el hielo? ¿Y este vacío, esta oquedad, no esperaba que lo llenaran con carne de verano, no tenía forma de... mujer? Sí.
    El hielo. Y los huecos adorables, la corriente horizontal de vacío dentro del hielo. La adorable nada. La exquisita corriente de una sirena invisible, que desafiaba al hielo.
    El hielo estaba frío.
    El vacío dentro del hielo era tibio.
    Charles Halloway quería irse, pero se quedó allí mucho tiempo, inmóvil, en la noche rara, mirando una tienda vacía y los dos caballetes paralelos y el frío ataúd ártico que esperaba ahí en la oscuridad como una Estrella de la India".

    By Anonymous Anonymous, at 1:32 PM, March 12, 2010  

  • A mí me pasa lo mismo con los hombres,bueno no con todos, y en diferente anatomía, pero me dan ganas de tomar su espalda recorriendo primero los brazos, hasta llegar a los hombros y luego abrazarlo.

    By Blogger Unknown, at 10:52 AM, March 14, 2010  

  • cata: la verdad es que no soy muy conocedor de la obra de Bradbury, o sea, aparte de farenheit 451 y crónicas marcianas, no leí mas cosas del ñato este. Pero me entró la curiosidad con el fragmento que pusiste de esa novela, la busqué, me puse a leerla... y esta buenísima! mil gracias por tu aporte.

    cr: mmm que lindo es ser sorprendido así por la espalda... hey! de un modo absolutamente heterosexual, claro está jajaja

    By Blogger JP Lima, at 12:36 AM, March 16, 2010  

  • bastante paja eso de andar mirando maniquíes en bolas y ni hablar de la gaydad de la reflexión "eso es un hombre".
    yo tengo tanta curva que si me pasás la mano por la cintura no fluye, te chocás con el ángulo de cuando arranca la cadera, jaja casi paralela al piso.
    me encantó eso de que estar abrazado es el mejor ejercicio de relajación ♥

    By Anonymous laconicalambada, at 12:11 PM, March 16, 2010  

  • ahhyy vos te acordás de esos pibitos silverchair? te gustaban?

    By Anonymous laconicalambada, at 7:53 PM, March 16, 2010  

  • Oh! Me alegro mucho de haber tenido ese efecto..mi familia es fanática de Bradbury asique lo leí casi todo, para mí su obra es despareja pero esa novela es hermosa! Tiene otra linda también que se llama El vino del estío, pero al lado de La feria es muy chiquita.
    Aguja de coser..de la libélula!
    cata

    By Anonymous Anonymous, at 9:02 PM, March 16, 2010  

  • - pero q mira la gorda q esconde la barriga te digo! y a la flaca lunga sin nada pa mordisquear....
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    Bueno, bueno, si... que a mi no me pinta abrazar demasiado a la gente en público... como que no es mi estilo, viste? marcar territorio, pipipi que ni da papito.... c entiende? que estoy muy segura.
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    Igual comparto la movida de la comparación cn las curvas... yo x ej me parezco c/v más a un San Felipe ajajajaj pero me encanta y cuando no me guste más cambio, que no hay mucha vuelta
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    -que mi cabeza borracha no distingue... me gustan los hombres discretos pero bueno, se mueren en el intento.
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    ................. tu-tu-tu..... cortó el maldito cerdo...

    By Anonymous Anonymous, at 11:08 PM, March 16, 2010  

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