Se juega como se vive

Y si... definitivamente el "flaco" Menotti tenía razón. Sucede que, ultimamente en el plano futbolístico, me estaba convirtiendo en un "3" de mucho sacrificio y poca marca, pero dedicado pura y exclusivamente a tratar de cumplir con mi tarea dentro del equipo y nada más. Todo bién hasta que, inesperadamente, empezaron a llegar las temidas derrotas: 1, 2, 3... 5 consecutivas... la puta madre es mucho!! pero lo más preocupante aún era la pérdida de mi espíritu de lucha; nunca antes me había sucedido asumir la derrota con tanta naturalidad, esa no era mi actitud en el pasado. Hasta que me acordé de aquella famosa frase patentada por Menotti y ante la cual tuve que rendirme; "se juega como se vive". Y tiene razón carajo!. En el plano personal mi vida transcurría por los mismos senderos derrotistas. Es así como, en un rapto desesperado, empecé a modificar mi postura ante la vida con el único motivo de, siguiendo a rajatabla la máxima "menottista", cambiar mi realidad futbolística (mi vida puede ser una mierda, pero no puedo permitir que eso se traslade hacia "mi" futbol). Y automaticamente empezó a surtir efecto: una mayor agresividad, acompañada de un profundo cambio de mentalidad condujeron hacia una reestructuración bastante favorable. Sin dar nada por perdido, hasta los resultados más adversos se vuelven revertibles, y con solo aplicar una pequeña cuota de materia gris los triunfos estaban de regreso.
También en el futbol.

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