Exceso de grasa en los medios
En el periodismo deportivo hay algo que me vuelve loco, que me preocupa soberanamente. Es que no logro terminar de entender por qué ciertos personajes que se "sacan el casette" para responder a las "incisívas" preguntas de algun muñeco con micrófono de turno, automaticamente se los tilda de problemáticos o suicídas, por no medir sus palabras. Lo gracioso es que son después esos mismos medios quienes se quejan por la falta de profundidad en las respuestas de sus entrevistados (y... si al termino de un partido de fútbol te encara un Benedetto microfono en mano y te pregunta "fue un triunfo sufrido pero lo supieron sacar adelante", entonces practicamente no hay lugar para la respuesta, ya que la misma esta incluída en la ¿pregunta?).
El nuevo fenómeno mediático es un gordo que juega al fútbol, que le dicen el ogro y que al parecer es el responsable de un importante repunte en la economía de DreamWorks al impulsar las ventas de la careta de Shrek (cuya sucursal DreamWorks-La salada experimenta un 200% de incremento en las ventas de mencionado producto). Es gordo y bocón, y si le ponen un micrófono adelante se lo zampa como si fuera un cucurucho relleno de pistacho. El periodismo deportivo lo ama porque no mide en ningun momento sus respuestas, es de esos boludos lindos que dicen lo primero que se les cruza por la cabeza, sin temor a las consecuencias. El otro periodismo consulta a especialistas en nutrición para saber si es saludable hacer deporte con sobrepeso. Tiran titulares como "ahora la moda es ser gordo". Y en el medio de esto hay un gordo que juega fenomenal al fútbol (dato que a nadie importa), y que esta disfrutando este ensalzamiento mediático a su gruesa figura, como un niño (gordo) en una fabrica de dulces. A este ritmo, en cualquier momento será la imagen de las pastas Addario.
Pero todos sabemos que el día de mañana la ogromanía pasará al olvido. Y ya sabemos que cuando mas alto te suben los medios, mas fuerte es la caída, especialmente si se es gordo. Y no se que tan buena puede llegar a ser la leña del gordo/ogro caído...

